Formas de amar más allá de la monogamia
Vivimos en una época en la que muchas personas se preguntan si la monogamia es la única forma de tener una relación sentimental con otra persona. De acuerdo con una investigación en Estados Unidos, los jóvenes menores de 30 años tienen mayor tendencia a tener un tipo de vínculo diferente a la monogamia: sólo el 51% dijo que su relación ideal es completamente monógama, lo que deja el 49% restante con la idea de intentar algo más.
“Algunos estudios han revelado que las relaciones no monogámicas están funcionando tan bien como aquellas en las que están presentes sólo dos personas. En todo caso, lo más importante es entender que en todas las opciones están en juego los sentimientos e integridad del otro, por lo que siempre debe existir confianza, honestidad, respeto y, sobre todo, consentimiento”, explica Rocío Cardosa, project manager de AdoptáUnChico.
Ante este panorama tenemos la oportunidad de conocer nuevos conceptos y modos de relacionarse, por lo que te presentamos 4 formas de amar más allá de la monogamia:
1. Poliamor
A diferencia de lo que se cree, el poliamor no consiste en tener muchos encuentros sexuales, sino que se basa en el compromiso, pues consiste en sostener una relación romántica con más de una persona al mismo tiempo. La prioridad es la intimidad y la conexión, ya que es necesario dedicarle tiempo, respeto y amor a cada uno de los vínculos que tengas con alguien.
2. Relaciones abiertas
Suelen confundirse con el poliamor, pero la diferencia es que mientras en este último existe una conexión romántica que conlleva un compromiso, en una relación abierta sólo se permiten los encuentros sexuales fortuitos. Lo esencial en este trato es el consentimiento, ya que es lo que lo vuelve diferente a una “infidelidad”.
3. Swinging
El swinging hace referencia a parejas comprometidas que deciden intercambiarse con otras sólo para tener sexo. La idea principal de esta práctica que es considerada por algunos como “un estilo de vida”, es que las relaciones sexuales son compartidas, además de casuales, lo que quiere decir que vives con tu pareja una experiencia conjunta en la que cada uno obtiene placer.
4. Anarquía relacional
En esta dinámica, las personas optan por no priorizar las relaciones románticas sobre las que no lo son como las de amistad, familiares, sexuales, etc. Parte de una filosofía que propone cambiar la organización social para modificar la jerarquía y privilegio con el objetivo de darle la misma relevancia a todos los vínculos.
“Sea cual sea la dinámica que más te guste, el propósito es que te sientas bien con vos misma, así podrás ser coherente con los demás. La monogamia fue la forma en que a la mayoría nos enseñaron a querer, pero tenemos la oportunidad de expandir nuestros horizontes y darnos cuenta que el amor se trata de respeto, sentimientos e interés”, concluye Rocío Cardosa.